¿Cómo afectan los refrescos al comportamiento de los niños?

Según distintos estudios publicados recientemente,  el consumo de refrescos puede derivar en problemas de salud entre las sociedades habituadas a este tipo de bebidas gaseosas azucaradas; e incluso, en el caso de los niños, también hay riesgo de que produzcan un aumento de un comportamiento agresivo. Según la revista The Journal of Pediatrics, el consumo de gaseosas entre los menores de edad aumenta la manifestación de ciertos síntomas de comportamiento entre los que figura la agresividad.

En la misma publicación se alude a un estudio realizado por Shakira Suglia, profesora de la Universidad de Columbia en Nueva York, quién comprobó en su trabajo que los niños que bebían cuatro o más refrescos diarios tenían más del doble de probabilidades de romper cosas que aquellos que no los consumían. Así mismo, la probabilidad de que los niños habituados a las gaseosas se peleen o ataquen físicamente a personas se multiplicó por dos.

Para la investigación se estudió el comportamiento de aproximadamente tres mil niños de cinco años de las 20 principales ciudades de Estados Unidos. De esta manera, los investigadores pudieron darse cuenta que el 43% de los niños consumen al menos una refresco al día, y el 4% llegaban a consumir diariamente cuatro o más. Sin embargo, debido a que los científicos se basaron únicamente en informaciones de las madres, no se pudieron identificar los tipos de refresco que los niños consumieron más y que, en consecuencia, podrían resultar más perjudiciales.